Nos hemos tenido que acostumbrar de a poco a las estupideces del Procurador General de la Nación, y parece que tenemos que seguirlo haciendo. Después de su grosera y desafortunada respuesta a la propuesta alternativa para tratar la adicción a ciertas drogas de Gustavo Petro,
el Procurador destiló de nuevo sus presuntos argumentos en contra de una visión alternativa sobre las drogas actualmente ilegales, proponiendo, como es habitual en él, convertir en decisión pública y mayoritaria (en el mismísimo País del Sagrado Corazón) decisiones que deberían ser individuales y en las que por tanto, el Estado no debería inmiscuirse. No debemos olvidar que una de las virtudes de la democracia moderna, es que en cierta medida salvaguarda a las minorías de la tiranía de las mayorías, lo que es aún más importante cuando dichas mayorías son constantemente mal informadas.
El Procurador además , como también es usual en él, comete varios errores y falacias lógicas. Veamos algunas:
- "La droga no es mala por prohibida, es prohibida porque hace daño". ¿Acaso decir "drogas" equivale a decir "drogas ilegales"? ¿Por qué son legales entonces tantas drogas peligrosas? ¿Por qué no prohíben la cafeína ? ¿Quién dice que todas las drogas producen daño en todas las condiciones?
- "Si se quiere variar la política prohibicionista acudamos a la constituyente, acudamos al referente, porque estas reformas se tienen que hacer de cara al país": ¿Por qué convertir en decisión de todos las decisiones individuales? ¿Está la gente preparada para decidir ésto, estando el tema tan rodeado de tergiversaciones y tabúes? ¿Por qué tendrían qué decidir otros lo que yo consumo?¿Por qué no mejor se invierte en una educación sin tapujos al respecto y que cada quién decida lo que quiere para sí?
- "En Colombia, por cada tres delitos que cometen los jóvenes uno se comete bajo la influencia de la droga". Ahora también tocará explicarle al Ilustre Procurador que una correlación no implica causalidad, que esos argumentos no son dignos de alguien con un cargo de su importancia (aunque esto no sea nuevo). Y de nuevo confunde "droga" con "drogas ilegales", pues supongo que el alcohol es una de las drogas que más delitos influencia (y con una relación más directa).
Debemos seguir apuntando a la realización de un debate sin rodeos al respecto, aunque se nos presenten con frecuencia estos obstáculos disfrazados de argumentos. Así, quizás algunas insensateces dejarán de cometerse.